Tengo
que enfrentarlo. Mis hijos van a crecer. Y eso ya está
sucediendo mucho más rápido de lo que me gustaría. Supongo
que es por eso que intento emprender con el corazón todas las buenas
ideas que escucho para disfrutar ahora que son pequeños. En algunas
de ellas soy buena, y en otras intento desesperadamente ser buena.
Pero vale la pena porque estas ideas que me han llegado como madre me
ayudan a dedicarme especialmente a mis "bebés" mientras
ellos me lo permitan.
1. "Movie
Night":
Nuestros amigos los Farnsworths nos
introdujeron en esto. Dave y yo tratamos de esforzarnos para
programar nuestras agendas y citas sociales en sábado, para poder
estar con los niños el viernes por la noche. La noche del viernes es
sagrada, porque es la "Noche de Cine". Preparamos palomitas
de maíz, hacemos galletas con pepitas de chocolate y vemos una
película. A veces es una película increíble que todos estamos
fascinados por ver, a veces resulta ser una pantomima que pensamos
que nos gustaría probar, a veces es una película que David trajo de
China con subtítulos molestos que cubren parte de la pantalla, pero
nada de eso importa mucho. Lo que importa es que estamos
juntos. Y a todos nos encanta. Inevitablemente habrá un momento
en el futuro en que nuestros hijos no van a pensar que es genial
estar en casa con sus padres un viernes por la noche para ver una
película, pero por ahora, somos unas súper-estrellas para ellos y
vamos a aprovecharlo mientras podamos!
2. Entrevistas:
Esta es una de las ideas en las que yo no soy buena pero estoy segura
de que quiero serlo. Mi papá comenzó esta tradición cuando
éramos pequeños. Nos pillaba en una esquina (por lo general en
el cuarto de baño ya que era el lugar más tranquilo que pudo
encontrar con nueve niños corriendo) y nos hacía una pequeña
encuesta una vez a la semana. Nos hacía todo tipo de preguntas y así
nos ayudaba a descubrir nuestros objetivos. Cuando éramos muy
pequeños nos escribiría la inicial de nuestros mejores talentos en
cada uno de nuestros diez dedos (como yo era "buena" en
arte, me escribía una "A" de Arte con un bolígrafo en mi
pulgar, y luego pasaba a mi otro "talento", para lo que
había que poner el dedo índice). Nos hacía sentir tan bien con
nosotros mismos. Él nos preguntaba en qué podía ayudar. Y
lo asombroso es que cuando crecimos y nos alejamos, él todavía nos
llama para las entrevistas. Como yo era la segunda hija, el
segundo domingo siempre fue el mío. Me llama y me hace mi
"entrevista" tradicional por teléfono. Esto es algo
difícil de hacer con mis hijos, porque yo no soy ni de lejos tan
organizada ni tan fabulosa como mi papá. Pero yo disfruto
escribiendo cartas ocasionales en las manos de mis hijos y los he
acorralado para una "entrevista" en alguna ocasión. Este
año he decidido tratar de hacer las entrevistas en nuestras fechas
de almuerzo mensual, que es la siguiente idea ...
3.
Días de comida: sé que llegará un momento en que tendré que
tomarme la escuela más en serio. Pronto estarán en el instituto, y
antes de que me dé cuenta estarán rellenando solicitudes para la
Universidad. Pero ahora están en primaria, por suerte, y a veces
dejo que mis hijos se pierdan algunas clases. Shhh, es un secreto!
Los llevo uno por uno una vez al mes a comer conmigo, durante largo
tiempo. Es el único momento en que puedo pasar tiempo con cada uno
de ellos a solas. Sí, Lucy y Claire van con calma, y sí, a veces es
suficiente para alterar a las buenas personas que pensaban que en
Wendy's podrían tomarse un descanso tranquilo en su día de trabajo
y no quieren ser molestados por dos niñas que lanzan las patatas
fritas por el aire. Pero esos niños a los que saco de la
escuela saben que es su día especial, y sus ojos brillan con la
emoción de poder pedir lo que quieran y tenerme sólo para ellos. Me
encanta que Max todavía pida que sea "su" día. Este
año estoy tratando de aprovechar para hacer las "entrevistas"
con cada niño durante estas comidas especiales (en medio de los
nuggets de pollo y la lucha sobre quién recibe los últimos bocados
del McFlurry ... sí, lamentablemente por lo general comemos en un
Wendy's o McDonald's o con un Jack in the Box, pero ellos eligen y lo
acepto. Busco llevar bien lo que mis padres llaman "las 5
Facetas" con ellos. ¿Cómo lo hacen 1) espiritualmente, 2)
física, 3) mentalmente, 4) emocionalmente, y 5)
socialmente?. Hacemos metas mensuales de cómo se puede mejorar
en cada una de estas categorías. Y entonces puedo programar
estas cosas en mi agenda para ayudarles (no he conseguido ser buena
en esto todavía). Pero me encanta esta conexión con ellos. Adoro
decirles lo mucho que los amo por encima de nuestra comida "gourmet".
4.
Cartas del Día de la Madre: Siendo una fanática de guardar
recuerdos, me encanta escribir cartas a mis hijos. Quiero que tengan
un registro de lo mucho que me encanta cada pequeña cosa que
hacen. Cuando Max y Elle eran pequeños yo era buena en esto y
les escribía cartas todo el tiempo. Pero luego se hizo más y más
difícil encontrar tiempo para hacerlo. Así que hace un par de
años decidí que pediría un par de horas a solas en mi cuarto cada
día de la madre para escribir una nota especial de amor a cada
uno de mis hijos. Me encanta saber que las tengo guardadas para
ellos. Quiero que recuerden siempre lo mucho que los amo en
todas las etapas y lo que voy descubriendo de ellos cada año.
5. "Lo
mejor" y "Lo peor":
Otra de las grandes ideas de mi padre (no soy nada imparcial, lo sé,
pero creo que son increíbles). Cada
noche en la cena los niños nos dicen "lo mejor" y "lo
peor" de su día. Para Claire "lo mejor" es,
inevitablemente, lo feliz que estaba porque una amiga podría
venir y "lo peor" cuando dijo que no podía. Pero la
mayoría de las veces esto nos lleva a buenas conversaciones y ayuda
a los niños a contarnos lo que realmente sucedió durante el día,
en lugar de simplemente decir que ha estado "bien" o
"mal". Me gusta escuchar los detalles y esto es una
buena manera de conseguirlo.
6.
Trasnochadas: Lo hicimos muy bien el año pasado, pero este año
no tan bien... Creo que esto es algo que funciona mejor cuando todos
los niños se van a la cama a la misma hora, y en nuestro caso los
niños se acuestan más escalonadamente conforme se hacen mayores.
Pero me encanta de todos modos, así que lo incluyo. La "Trasnochada"
es cuando un niño puede acostarse una vez a la semana 10 o 15
minutos más tarde que los demás. Les encanta. Es un corto
período de tiempo, pero sienten que son más afortunados que nunca
cuando llega su turno, y nos encanta darles un poco de atención
individual uno por uno.
7. "Coge
DIEZ": Esto en realidad no tiene mucho que ver con
compartir tiempo con los niños, pero seguro que convierte la
situación en menos caótica cuando se hace y entonces podemos
apreciar las cosas buenas y disfrutar más a menudo. No tengo ni idea
de donde me enteré de esto, pero me encanta. Siempre que la
casa se pone realmente desordenada... sábados por la tarde, entre el
momento en que los niños llegan de la escuela y la cena, domingos
por la tarde, etc. (bueno, más o menos un par de veces al día),
decimos "Coge DIEZ" y los niños tienen que recoger cada
uno 10 cosas. Me encanta porque ellos saben hacerlo, y no sólo ayuda
a conseguir que la casa quede ordenada más rápido, si no que además
ayuda a que los niños sepan dónde va cada cosa y conseguimos
que guarden todo en su sitio por sí mismos.